Esto se puso bueno. Francia acaba de aprobar una ley que obliga a empresas como Apple y Sony a revelar los secretos de sus formatos propietarios para salvar música si quieren seguir vendiendo en Francia. Lo que se busca es liberar a los consumidores del problema que representa comprar una canción y no poder moverla en los distintos aparatos que se tengan.

Las empresas dedicadas a la industria musical han manifestado su aprobación por la ley, mientras que las empresas afectadas no han comentado nada.

Por otro lado, la ley cambia las penas por piratería de los improbables 365 mil dólares que ponían antes para quien compartiera archivos a los más reales 50 a 180 dólares (sin tiempo en la carcel) por el mismo crímen.

Veamos que pasa en los días por venir...